Indonesia dispone de un avanzado sistema de alerta contra tsunamis, incluyendo una red de 21 boyas, que debería haber transmitido alertas tempranas a partir de los datos recogidos por sensores de aguas profundas. Aún así, el desastre ha causado la muerte de cientos de personas y la desaparición de otras muchas que todavía no han podido ser encontradas, después de que un tsunami golpeara la isla indonesia de Sulawesi el viernes 28 de septiembre de 2018 como consecuencia de un potente terremoto.

A las 18.03 hora local se produjo un terremoto de magnitud 7,5 tuvo en la isla de Sulawesi. La agencia de meteorología y geofísica BMKG emitió una alerta de tsunami justo después del temblor inicial que avisaba de potenciales olas de 0,5 m a tres metros. Apenas 30 minutos después canceló la alerta. Pero la ciudad de Palu, situada en una estrecha bahía, fue golpeada por olas de hasta seis metros que barrieron todo lo que encontraron en su camino, derruyeron edificios y causaron una amplia destrucción. Al mismo tiempo, centenares de personas se habían reunido para celebrar un festival en la playa (BBC News). La tarde noche del domingo las autoridades nacionales encargadas de mitigar los efectos de la catástrofe confirmaron que al menos 832 personas habían perecido. (The New York Times)

indonesia de Palu, argumentando que un terremoto como el que precedió no necesariamente debería provocar olas tan destructivas (The New York Times). ¿La explicación de por qué se desataron olas tan masivas sobre Palu podría estar, quizás, en la propia naturaleza de la bahía. Según el doctor Hamza Latief, oceanógrafo del Instituto de Tecnología de Bandung, Palu había experimentado tsunamis en el pasado y cuando un tsunami golpea su estrecha y alargada bahía, el impacto se amplifica (BBC News).

Sin datos de los sensores marinos

Indonesia posee un avanzado sistema de alerta, incluyendo una red de 21 boyas, que podría haber transmitido alertas tempranas basadas en los datos recogidos por los sensores de aguas profundas. Sin embargo, ninguna de estas boyas lo hizo. Algunas habían sido objeto de vandalismo, mientras que otras habían sido robadas. El remplazo del sistema se había retrasado debido a la falta de medios.
BPPT, la agencia que gestiona el sistema de boyas, había reconocido previamente que los esfuerzos del Gobierno se habían centrado mayoritariamente en proporcionar ayuda tras un terremoto, prestando una atención “mínima” a anticipar catástrofes. Si las boyas hubieran proporcionado datos, “nuestro nivel de alerta de tsunami habría sido más preciso”, comentó el señor Triyono a la BBC de Indonesia (BBC News).

La ausencia de sirenas en un sistema de alerta

Existe, sin embargo, un problema mayor: se envió a la población residente repetidos mensajes de texto de alerta de tsunami que quizás no recibieron. Un portavoz de la agencia encargado de hablar sobre la catástrofe dijo que el temblor había inutilizado las líneas de suministro eléctrico y comunicaciones de la zona y que no había sirenas a lo largo de las costa, lo que podría haber causado que las alertas enviadas fueran básicamente inútiles (BBC News).

Es crucial una intervención rápida antes, durante y después de que ocurra un desastre. Los sistemas de alerta de Telegrafia alertan a las personas utilizando sirenas electrónicas que disponen de baterías de respaldo integradas. Las sirenas continúan totalmente operativas incluso en caso de una caída del suministro eléctrico y/o de las comunicaciones.

Referencias:

El sistema de alerta de tsunamis en Malasia

El sistema de alerta de tsunamis en Galápagos

Artículo escrito por

Miroslava Malachovska

Miroslava es directora de marketing. Lleva más de doce años trabajando para Telegrafia. Empezó como asistente en el departamento de ventas para trabajar posteriormente como coordinadora del centro de formación. Después de reincorporarse tras la baja de maternidad ha estado trabajando para el departamento de marketing. La experiencia y el conocimiento obtenidos le han proporcionado una sólida base para el desafiante y creativo trabajo que realiza ahora en el departamento de marketing. Le gusta correr y se mantiene en forma con un entrenamiento regular y preparándose para correr medias maratones.