Seguramente recordará cómo al final de cada episodio de la serie Scooby-Doo se desenmascaraba a un gigantesco monstruo. Siempre se trataba de uno de los mayores villanos que podía existir. La escena iba acompañada de una explicación racional sobre los actos “sobrenaturales” del monstruo que aclaraba el misterio. ¿Pero qué pasa cuando la bestia no es una máscara? Bueno, eso es lo que ha sido realmente el año 2020. ¡Un año definitivamente para olvidar!

Ninguno de nosotros llegará a saber nunca por qué todo lo malo que nos ha ocurrido se ha acumulado en un único año, con independencia de la pandemia global más importante de los últimos tiempos. Nuestro mundo no solo ha sido torturado con virus, odio y tragedias el último año, sino que la Naturaleza, como si de un titiritero se tratara, ha puesto en escena su espectáculo utilizando nuestro planeta. Los desastres naturales han afectado prácticamente a cada continente, dejando tras de sí devastación económica, notorios daños materiales y enormes pérdidas de vidas inocentes. Pero ¿y si hubiera alguna manera de prever estos daños y pérdidas, o al menos de reducirlos? No escribiríamos al respecto si no hubiera solución. La solución es Telegrafia. Nosotros somos la solución.

Nuestros sistemas de alerta pueden proporcionar soluciones para prevenir y mitigar los efectos de desastres naturales como terremotos, huracanes, incendios forestales, inundaciones o tsunamis. Volvamos la mirada hacia algunos de los desastres naturales acontecidos en 2020 donde nuestra compañía podría haber servido de ayuda.

Los incendios forestales en nuestras antípodas empezaron en diciembre de 2019 y no mostraban señales de reducirse o cesar. Mientras que la mayoría del mundo estaba celebrando el Año Nuevo, Australia luchaba contra uno de los mayores desastres naturales de su historia. En enero de 2020 fueron varios los estados que declararon la situación de emergencia. Según los informes oficiales uno de los cuatro elementos básicos de la vida quemó más de 18,6 millones de hectáreas de terrenos, destruyó más de 5.900 edificios y mató a ingentes cantidades de animales. El fuego causó la muerte de 34 personas, mientras que más de 400 fallecieron debido a la inhalación de humo.

América fue golpeada por desastres naturales a gran escala que conllevaron enormes costes económicos. Además de la pandemia, la economía americana fue puesta a prueba por el huracán Eta. Llegó justo antes del final de una de las peores temporadas de huracanes y causó inundaciones y fuegos arrasadores, cobrándose un alto peaje en todo el continente, en Honduras, Guatemala, México, El Salvador, Panamá, Nicaragua y Costa Rica.  La catástrofe causó pérdidas por más de 60 mil millones de dólares y se cobró 150 víctimas.

La capital indonesia de Jakarta y sus áreas colindantes sufrieron un terrible inicio de año debido a las extensas inundaciones que tuvieron lugar el 1 de enero. Más de 400.000 personas se vieron forzadas a abandonar sus hogares. Las inundaciones estuvieron acompañadas de fuertes lluvias que causaron aún más daños, ya que los ríos locales se desbordaron dejando a poblaciones enteras bajo un metro y medio de agua. El agua se llevó la vida de 66 personas que perdieron su batalla contra el agua, los deslizamientos de tierra o las descargas eléctricas.

El volcán Taal es el segundo volcán más activo de Filipinas. Su erupción el año pasado cubrió de cenizas un área de 100 kilómetros. El estallido anterior de este volcán tuvo lugar hace 43 años. La explosión causó enormes nubes de ceniza y provocó la evacuación de más de 300.000 personas. Los informes hablan también de un total de 2.484 terremotos volcánico-tectónicos, de los cuales 176 fueron perceptibles. El desastre se cobró la vida de 39 personas. Filipinas está todavía recuperándose de las secuelas del desastre.

Los terremotos no fueron un fenómeno extraordinario en 2020 y su lista sería bastante larga. En total se produjeron más de 45 terremotos con una magnitud superior a 6 grados. La costa turca bañada por el mar Egeo y la parte norte de la isla griega de Samos fueron golpeadas por un terremoto de 7 grados de magnitud. El movimiento sísmico provocó también un pequeño tsunami que inundó la ciudad turca de Izmir y la isla anteriormente mencionada. Docenas de personas perdieron la vida.

El planeta Tierra experimentó el año pasado escenarios que parecen extraídos de películas de catástrofes. La lista de catástrofes mencionada añade solo una pizca de sal a las profundas heridas que padece ya nuestro planeta. Pero todavía hay más, como el devastador ciclón Amphan en la India y Bangladesh, las inundaciones en India, Japón, China y Afganistán, u otros huracanes en los Estados Unidos. Incluso las peligrosas plagas de langostas en el África oriental y algunas partes de la India y Asia que causaron daños a millones de acres de cultivos en los continentes infestados.

No obstante, los sistemas de alerta de Telegrafia pueden proporcionar soluciones completas. Nuestros productos pueden transmitir información a tiempo a aquellas personas responsables como bomberos, equipos de rescate y servicios de emergencia en cualquier situación, ayudando así a informar o alertar rápidamente a la población, un elemento crucial en este tipo de escenarios catastróficos. En el centro de nuestras soluciones están las mejores sirenas electrónicas del mundo que, combinadas con otras tecnologías eficientes, pueden aplicarse en varios sectores y hacer sonar la alarma allí donde sea necesario. Puede obtener más información sobre nuestras soluciones en nuestra página web. Cada segundo cuenta.

Ahora solo nos queda esperar que 2021 no se ponga el disfraz de 2020.

The article was written by

Róbert Jakab

Robert is like moving photography – because he is a video. He is able to capture 60 frames per second, so when something happens, he records it. He is also works on smaller videos to make an evening movie…and then continuing the second part. Telegrafia 2: Monkey power

Images:
Fikri RA, CC BY 4.0 <https://creativecommons.org/licenses/by/4.0>, via Wikimedia Commons
Oğulcan Bakiler (VOA), Public domain, via Wikimedia Commons
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